¿SABES QUE ES LA DISPLASIA DE CADERA EN PERROS?

Generalmente se desarrolla debido a una articulación de la cadera desarrollada de manera anormal, pero también puede ser causada por daño del cartílago por una fractura traumática. Con daño del cartílago o una articulación de la cadera que no está formada correctamente, con el tiempo el cartílago existente perderá su grosor y elasticidad. Esta ruptura del cartílago eventualmente resultará en dolor con cualquier movimiento articular.

Nadie puede predecir cuándo o incluso si un perro displásico comenzará a mostrar signos clínicos de cojera debido al dolor. La gravedad de la enfermedad puede verse afectada por factores ambientales, como la ingesta calórica o el nivel de ejercicio. Hay una serie de perros displásicos con artritis severa que corren, saltan y juegan como si no pasara nada y algunos perros sin apenas evidencia de rayos X artríticos que son severamente cojos.

Una vez que la osteoartritis está presente en una radiografía, los cambios displásicos son irreversibles y generalmente continúan progresando con el tiempo. Si un perro displásico tiene artritis y dolor secundarios, la mayoría de los dueños optan por tratar primero a su perro con un tratamiento médico. La clave es el control de peso y el ejercicio.

Mantenga al perro en un ambiente cálido. El calor tiende a ayudar a controlar el dolor de la artritis por displasia de cadera. Al igual que en las personas, el dolor artrítico en los perros tiende a empeorar en la humedad y el frío del invierno. Proporcionar una cama tibia y bien acolchada ayudará a aliviar parte del dolor asociado con la osteoartritis.

Una cama de espuma tipo caja de huevos para perros está disponible comercialmente. La aplicación de calor superficial en forma de almohadillas térmicas también puede aliviar el dolor. Se debe tener cuidado de no quemar la piel, especialmente con una almohadilla térmica eléctrica. El calor funciona mejor para las articulaciones crónicamente inflamadas por artritis, mientras que el frío funciona mejor para tratar los tipos agudos (repentinos) de lesiones articulares.

Existen tratamientos farmacológicos e intervenciones quirúrgicas que pueden ayudar, pero antes de iniciar cualquier terapia, se debe consultar al especialista Ortopédico tratante con un historial médico completo y un examen físico.